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Vidas eNpantalladas

La niñera-guionista-bióloga y los 7

Pocas series han tenido una protagonista tan protagonista como "Ana y los 7". Ana lo es todo: es el nombre de la actriz principal, de su personaje y del titulo de la serie. Además es la creadora de la idea, la guionista, y para colmo en la serie tiene dos trabajos: niñera y bailarina (que así queda más fino). Y por si fuera poco, Anita también es bióloga, con todas las matrículas de honor que obtuvo en la carrera no se nos podía pasar por alto. Aunque Ana, ante todo en la vida, es madre, no se nos olvide.
Pues así es Ana Obregón la multiprotagonista de esta singular serie, tan singular como la familia Hidalgo.

Fernando Hidalgo es el padre de esta numerosísima familia. Viudo desde el primer capítulo, como buen viudo de las series, con 7 hijos a su cargo en una casa de ensueño y por supuesto, millonario.



Así arranca la historia de los Hidalgo. Fernando trabaja en un banco junto a su secretaria Alexia. Al quedarse viudo, sus 7 hijos necesitan a una niñera que se haga cargo de ellos y qué mejor que la madre de todas las madres, Ana.
Anita encantada de vivir en esa mansión, a cargo SÓLO de los niños, porque para la cocina ya está Manuela y pa-pa-pa-para todo lo de-de-de-demás Bruno. La coletilla del título “y los 7” no se hace referencia a los 7 novios que podría tener Ana en la serie, si no a los 7 niños que cuida:

1- Carolina: encarna el tópico más tópico de una familia rica: el padre le obliga estudiar Derecho, pero ella como es tan alternativa (alternativa pija-millonaria, que es realmente lo que se lleva hoy en día) trabaja como voluntaria en una ONG (¡ay qué buenos son todos en la familia de Anita!). Su novio, cómo no, súper alternativo, se llama Leo y, cómo no, su padre no lo acepta para su hija.

2- Nando: el hijo mayor lleva el nombre de su padre, pero versión junior, claro: Nando. No sé por qué se empeñan en llamarle Nando cuando todos los telespectadores le llaman Chechu, eso de cambiarse de familia eNpantallada tiene sus problemas. Nando, pijo de los pies a la cabeza, para seguir la línea editorial de la serie, tiene unos amigos calcados a él, excepto Fonti, el fontanero de la serie. En toda familia de ricos tiene que haber un tonto con el que reirse y en casa de Ana si es fontanero mejor que mejor.

3 y 4- Amalia y Celia son las chicas que están en la edad del pavo. Son súper coleguis de Ana, porque Ana a pesar de su edad conecta a la perfección con ellas. No aportan mucho a la familia, pero como en la habitación hay 4 camas, 3 pupitres y un montón de sillas pues hay que llenarlas de alguna manera.

5 y 6- La probabilidad también está presente en casa de los Hidalgo. De 7 hijos, dos tenían que ser gemelos, todo para que la historia sea “idéntica” a la realidad. Son los traviesos de la casa, Álex y Guille, gemelos hasta en la realidad (ya les decía que han cuidado todo mucho para que sea real la serie)

Y la 7- Lucía, tras pasarse una temporada sin hablar, porque su madre había muerto (o porque a la guionista Ana no se le ocurría una frase para la niña), la niña es la mimada de la casa.

La familia Hidalgo no acaba aquí. Hay que sumar a los 7, a David, el hermano de Fernando. Llega de Argentina para quedarse en casa de su hermano. Allí conoce a Ana y claro, inician una relación amorosa, aunque a Ana le guste Fernando y viceversa, pues lógicamente, no va a terminar la serie en la primera temporada, que ha tenido éxito.
Por otra parte, Fernando, enamorado de Ana, inicia una relación con su secretaria Alexia. Un noviazgo que termina en boda. Una boda donde la protagonista fue Ana, que no se casó pero lloró y lloró solita en su habitación... (hasta en la boda del protagonista, Ana es la estrella de la serie)

Pasa un tiempo en las vidas eNpantalladas de esta familia y tras varios capítulos sin suceder nada: Fernando se separa de Alexia. Ana se casa con David. Ana se queda embarazada. Ana no sabe quién es el padre del hijo que espera (y eso que ella misma ha escrito los guiones...) y finalmente Ana descubre que Fernando SÍ ES EL PADRE DE SU HIJO (y sin ir a La hora de la verdad).

Y por último una anécdota sobre la profesión del señor, como le llama el personal de servicio (que hay más que niños, casi): Fernando es banquero, aunque en un principio iba a ser ministro, pero como la serie la compró una televisión pública se pasó al mundo de la banca, y así no hay problemas con el gobierno de turno. No sé porqué ningún partido quiere relacionar la vida de un ministro con la de un millonario con 7 hijos que pasa de sus hijos y que se casa con su secretaria, aunque está enamorado de su niñera que se ha casado con su hermano y que a su vez se queda ésta embarazada de uno de los dos hermanos que resulta finalmente su hijo...
Ayyyy ahora entiendo por qué Fernando es banquero...

2 comentarios

Amaia Serrano -

Yo quiero entrar en el club de las alternativas pijas-millonarias.

Oskia Poulain -

Hijo mío, estoy orgullosa de ti. Veo que estás madurando y que empiezas a darte cuenta de la falta de originalidad de los guiones en televisión. Si es que la Obregón lo ha copiado todo del ¡¡¡CINE!!! Su serie es un mix entre Sonrisas y lágrimas y Showgirls. Y es que lo que hacen algunas por lucirse...